miércoles 4 junio 2025 1:15 PM
Redactor : Tannia Alcaraz
Un estudio reveló que los bebés pueden presentar señales cerebrales tempranas de ansiedad y depresión, lo que significa un descubrimiento de gran impacto en el tema del desarrollo emocional de los recién nacidos.
Esta investigación, publicada en la revista Genomic Press, fue realizada por un equipo de expertos de la Universidad de Pittsburgh, en Estados Unidos, y aseguró que la arquitectura cerebral en los primeros meses puede influir notablemente en cómo se desarrollan las emociones y la conducta de los niños en los siguientes años.
El doctor Yicheng Zhang y la doctora Mary L. Phillips, quienes lideraron el estudio, aplicaron una técnica muy avanzada llamada Imagenología de Dispersión y Densidad de Orientación de Neuritas (NODDI), con la que pudieron observar con gran precisión cómo está organizada la sustancia blanca del cerebro en 95 bebés de apenas tres meses que participaron junto con sus cuidadores.
Los resultados revelaron que los bebes con mayor dispersión de neuritas en el fórceps menor (una de las áreas del cerebro) eran más propensos a tener reacciones emocionales intensas y difíciles de calmar. De acuerdo con Europa Press, uno de los aportes clave del estudio es que estas señales podrían permitir detectar riesgos emocionales en los menores antes de que los síntomas aparezcan claramente.
Cabe destacar que el estudio tomó en cuenta factores como el estado mental del cuidador y las condiciones socioeconómicas para analizar mejor la estructura cerebral, entendiendo que aunque el ambiente familiar y social importa, la base cerebral con la que se nace también es determinante.
Fuente: Imagen/JCG/Foto: Freepik
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