En mayo de 2019, durante la sesión extraordinaria #942 del Consejo de Administración de PEMEX, se aprobó aportar al capital de la empresa filial PTI Infraestructura de Desarrollo, S.A. de C.V. los recursos para construir la Refinería de Dos Bocas, en Paraíso, Tabasco. Pese a que esta empresa se rige por el derecho privado, la secretaria Rocío Nahle aseguró seguirían los más altos estándares de transparencia y rendición de cuentas; no obstante, esto no ha sucedido y hoy los mexicanos nos encontramos en la oscuridad respecto a sus operaciones, así como a los contratos y asignaciones que ésta ha emitido para la construcción del proyecto insignia de la 4T.
Para ejemplo de ello, basta decir que en respuesta a una solicitud de transparencia que presenté preguntando sobre la integración de su filial, PEMEX me respondió que ésta no contaba con una estructura organizacional y ¡ni siquiera tenía personal a su cargo! A dos años de su construcción, me dio a entender que el proyecto energético más grande de esta Administración está siendo construido por una empresa fantasma financiada al 100% con recursos provenientes de nuestros impuestos. Además, engañan al pueblo, ya que en otro acuerdo, el Consejo incorporó en el orden del día la autorización para contar con recursos humanos de PEMEX para este fin, sin embargo, eliminaron ese resolutivo del acta de acuerdos públicos.
Por si esto no fuera suficientemente, también solicité que me fueran enviados todos los contratos que esta empresa ha emitido para la construcción de la obra, recibiendo respuestas aún más decepcionantes. Por un lado, PEMEX TRI (quien le aportó el capital a la filial) se declaró incompetente a atender mi solicitud, remitiéndome a su vez al corporativo de PEMEX, el cual después de 4 meses sigue sin enviarme la información. En otras palabras, sólo se pasan la pelotita entre ellos mismos.
Cabe destacar que tampoco recibí la información de los contratos por parte de las instituciones que, según la secretaria Nahle, están encargadas de vigilarlos, y me refiero a SENER, SHCP, SFP y la ASF. Cada uno, a su manera, señalaron que no existía la información que estaba solicitando; pero la respuesta de la Auditoría Superior demostró que esto no es verdad, ya que me informó por escrito que hay más de 44 contratos que han sido emitidos por la empresa, mismos que han sido reservados por tener auditorías en proceso de desarrollo.
Como Diputada Federal tabasqueña, mi exigencia de que esta obra se lleve a cabo con total transparencia ha sido constante, especialmente considerando que es el único proyecto destinado para la recuperación económica de mi querido Edén. En este sentido, la plataforma de acceso a la información del INAI ha sido una gran herramienta para revelar que permanentemente el gobierno reserva, mutila e incluso niega información que debería ser pública. Por eso, esta semana estaré presentando una vez más, un recurso de revisión sobre este tema ante nuestro órgano garante de la transparencia, refrendando mi compromiso de llegar hasta la última instancia en aras de conocer la verdad sobre los avances, presupuestos ejercidos y empresas relacionadas con la construcción de la Refinería.
La opacidad alrededor del proyecto de la Refinería es sólo un ejemplo de un problema sumamente recurrente en esta Administración que debe ser resuelto. En el México que merecemos, estoy convencida que la información es poder y que ese poder debe ser de la ciudadanía no del gobierno.
@PerezSoraya
Paseo Usumacinta s/n Esq Ayuntamiento. Col Gil y Sáenz, Villahermosa, Tabasco