Las crónicas de los reyes Israel y Judá encierran en sus páginas lecciones de liderazgo, buen gobierno, imagen pública y muchas áreas más de verdadero interés en nuestros días para catapultar la carrera profesional.
Cuando se habla de Roboam, hijo del famoso rey Salomón, el relato referente al inicio de su reinado comienza así: “Roboam fue a Siquem, donde todo Israel se había reunido para proclamarlo rey. Cuando Jeroboam, hijo de Nabat, se enteró de esto, regresó de Egipto, donde había huido para escapar del rey Salomón. Entonces los líderes de Israel mandaron a llamar a Jeroboam, y él junto con todo Israel fueron a hablar con Roboam. Su padre fue un amo muy duro—le dijeron—. Alivie los trabajos tan pesados y los impuestos tan altos que su padre impuso sobre nosotros. Entonces seremos sus leales súbditos. Roboam les respondió: —Regresen en tres días y les daré una respuesta.
Así que el rey Roboám hizo dos cosas: primero, consultó a los consejeros experimentados, hombres de edad avanzada que habían trabajado con su padre. El consejo de estos fue muy claro y simple: “Si se muestra bondadoso con este pueblo y hace todo lo posible por complacerlos y darles una respuesta favorable, ellos siempre serán sus leales súbditos”.
La respuesta no dejó conforme al inexperto rey, quién acudió con la misma solicitud de consejo, en esta ocasión a quienes se habían criado con él, su consejo fue el siguiente: “Así debería responder a esos que se quejan de todo y que quieren una carga más liviana: “¡Mi dedo meñique es más grueso que la cintura de mi padre! Es cierto que mi padre les impuso cargas pesadas, ¡pero yo las haré aún más pesadas! ¡Mi padre los golpeaba con látigos, pero yo los azotaré con escorpiones.
Roboam siguió el consejo de los más jóvenes y cuando el pueblo recibió la respuesta a su solicitud al tercer día, el joven rey se mostró autoritario, déspota, voluble y cruel.
Cómo era de esperarse el pueblo se negó a servirlo y a partir de ese momento Israel sirvió a otro rey.
Como sabiamente aconsejaron los ancianos a Roboam, la respuesta bondadoso traería, entendimiento y favorecería en la lealtad de sus súbditos. Desafortunadamente hay quienes piensan que es mejor ser temido a ser amado, Maquiavelo era uno de ellos, y por más astuto que fue, la historia desmiente la idoneidad de sus métodos.
Cuando trasladamos estás historias a nuestro ámbito laboral o personal, los resultados no son diferentes y las empresas se dan cuenta de ello. Está es la razón por la que buscan personal debidamente entrenado y cualificado, por ejemplo, Uber eats, división de comida de Uber empresa transnacional cuenta con personal encargado de dar soporte y ayuda al cliente en nuestro país, pasando con 10 la prueba de fuego, no solo en sus evaluaciones de entrenamiento sino en cada uno de los casos reales que atienden. El secreto de su éxito es exactamente el mismo que se le dio a Roboám por parte de los consejeros de su padre, la amabilidad no se pierde aunque la otra parte grite. Y, eso requiere de una gran control y dominio propio, este personal conserva la calma, y a la mitad de la llamada el efecto de su amabilidad ya se ha producido, al final de ésta, el cliente ha pasado del enojo a la satisfacción.
No obstante, debe entenderse que esté éxito no consiste en callar ni mucho menos en seguirle la corriente al cliente; se trata de mostrar verdadera empatía, de saber escuchar y emplear el tono correcto de voz. En resumen, la amabilidad cobra vida al ser genuina.
Esta habilidad para tratar con gente difícil y furiosa es deseada y tan valorada como el oro, y los reyes en este sector son los dominicanos y gente de otras regiones antillanas y de América Insular. Al parecer está gente tiene características únicas en el trato con la gente, y es la razón por la que empresas como Paypal, Amazon, Uber, entre otras los busca para colocarlos en estos puestos.
El sabio Salomón dijo que “La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor. La lengua de los sabios adornará la sabiduría; Mas la boca de los necios hablará sandeces”. Así que si tienes la necesidad de tratar a alguien que prácticamente trina del coraje, aplica este consejo sencillo y efectivo que hará que tú imagen profesional sea aún más valiosa.
Paseo Usumacinta s/n Esq Ayuntamiento. Col Gil y Sáenz, Villahermosa, Tabasco