Con la apresurada retirada de Estados Unidos de Afganistán y el control de ese país, recién tomado por el grupo islámico radical denominado los talibanes, se inicia una nueva era de la política internacional, cuyas repercusiones podrían llegar hasta América.
El viejo debate noventero, entre la teoría expuesta por el académico norteamericano Francis Fukuyama y Samuel Huntington, mantiene actualidad.
Fukuyama en su libro “El fin de la historia y el último hombre”, pronosticaba el fin de las guerras y las revoluciones sangrientas, pero fue replicado por Samuel Huntington en su obra titulada “El choque de civilizaciones”, donde predecía que las nuevas confrontaciones internacionales ya no serían ideológicas, como había sucedido durante la denominada ”guerra fría” que enfrentó al bloque soviético, comunista, contra el mundo capitalista liderado por Estados Unidos, sino un choque de civilizaciones, lo cual se refiere de modo integral a estilo de vida, visión religiosa, valores, el modelo de gobierno, tradiciones, cultura y todo aquello que tiene significación e impacto en la identidad colectiva.
Hoy percibimos que en respuesta al efecto unificador que está logrando la globalización, en paralelo y como respuesta inversa, se ha generado un fenómeno contracultural que en cada país se manifiesta en el regreso a las raíces propias, a su cultura originaria, sus valores y diferenciación, como describe Huntington.
El separatismo de los ingleses respecto a la Comunidad Europea y el intento de los catalanes de abandonar España, por citar unos, pero lo más grave es la forma en que se manifiesta en el mundo musulmán con el retorno a sus costumbres ancestrales y revalorización de la vida religiosa como eje de la conducta colectiva y también de la personal, que en su manifestación más radical lleva implícita la rivalidad en contra del mundo occidental cristiano.
Sólo necesitamos ver como vestían y como era la vida totalmente occidentalizada en Afganistán en los años ochenta y cómo se vivió la represión impuesta por los radicales talibanes a partir de 1996, para entender el futuro del mundo, dividido no en dos bloques ideológicos como sucedió durante la guerra fría de los años cincuenta a los ochentas, caracterizada por la confrontación entre el comunismo y el capitalismo, o sea, la ya superada lucha entre la izquierda y la derecha, sino a partir del choque religioso, entre el mundo cristiano y el musulmán, como sucedió en la guerra de Las Cruzadas, hace casi mil años, con la diferencia de que este puede llegar a ser un conflicto global y no sólo ubicado en medio oriente, como antiguamente sucedía.
A partir de los años sesenta, por poner fechas, los países árabes y en general el mundo musulmán se vincularon a occidente y no fue mal visto que las élites enviasen a sus hijos a estudiar en Inglaterra o Francia, e incluso, se casasen los hombres con mujeres no musulmanas.
El regreso de los talibanes al poder significa la imposición, con obligatoriedad y graves castigos para quienes no cumplan, de la rígida moral religiosa del Islam y la pérdida de las libertades que en los últimos años había ganado la población. Por ejemplo, la liberación de las mujeres musulmanas respecto a las milenarias restricciones que debían cumplir en su vida privada, las cuales impone la denominada “sharía”, que es la “ley islámica”, donde está contenido un conjunto de reglas que rigen la conducta personal, como lo es por ejemplo, el impedimento para que las mujeres mayores a diez años de edad vayan a la escuela, la obligación de cubrirse el rostro al salir de su casa, impedimentos laborales, entre otras restricciones.
El impacto que esto podrá tener en el resto del mundo, estimulando el conflicto entre el mundo musulmán y el cristiano, debiese convertirse en una llamada de atención para que no regresen los tiempos de incertidumbre provocados por ataques los terroristas que se vivieron hasta hace poco tiempo en muchas ciudades europeas
DEMOCRACIA CON ADJETIVOS
Las declaraciones del presidente López Obrador en la mañanera del viernes respecto a la visita de Santiago Abascal, líder del partido español VOX a México nos debiesen preocupar, pues definen con claridad lo que el presidente entiende por democracia.
Al margen de tener empatía o antipatía con VOX, las declaraciones del presidente son muy desafortunadas, pues representan un reconocimiento explícito de que, para él, democracia es aceptar solamente las actividades políticas de quienes piensan como él, pero las que realicen sus detractores o adversarios, deben ser consideradas trabajo de sedición, al margen de la ley.
Quien tantos años luchó desde el rol de opositor por enriquecer la democracia y que se le respetara su derecho a disentir, ya no parece practicar, como gobernante, los postulados de su propia causa política.
La simple mención ayer viernes durante la mañanera, del “artículo 33” constitucional, que prohíbe a los extranjeros intervenir en la política nacional y da luz verde a su deportación”, podría ser interpretada como una advertencia o amenaza, aunque él asegurase que no la va a aplicar… pues aquí hay libertad.
A buen entendedor…
En el mismo PAN no todos están convencidos de que abrirle las puertas a VOX en este momento fuese una decisión conveniente, pero este debate por parte de las bases panistas enriquece la cultura democrática de ese partido, pues se realiza en un marco de respeto a la opinión del interlocutor.
Tratando de entender la visión democrática de nuestro presidente: ¿la participación de morenistas distinguidos en las actividades del Foro de Sao Paulo… así como las visitas de asesores venezolanos y cubanos a nuestro país en las elecciones y también la participación pública de un asesor español, por cierto, andaluz, quien mediáticamente hace provocaciones incendiarias a favor de MORENA, sí forman parte de la vida democrática, igual que el apoyo a Evo Morales ya como expresidente?... ¿Estas acciones sí enaltecen nuestra democracia? … ¿Pero en cambio recibir a Abascal, el dirigente de VOX, no?
No comparto totalmente los postulados de VOX, pero sí sé que la verdadera democracia implica el respeto absoluto a la opinión disidente. Por preservar esta libertad debemos luchar.
CABALLO NEGRO
¿Será que el verdadero candidato que piensa impulsar el presidente López Obrador para el 2024 es quien se acaba de integrar al gabinete?... ¿Los nombres barajados anteriormente habrán sido sólo distractores?
¿A usted qué le parece?
Facebook: @Ricardo.Homs1
Twitter: @homsricardo
Linkedin: Ricardo Homs
www.ricardohoms.com
Paseo Usumacinta s/n Esq Ayuntamiento. Col Gil y Sáenz, Villahermosa, Tabasco