Lograr un equilibrio para la convivencia en un estado altamente politizado no es tarea fácil, pero debe intentarse si lo que se busca es el beneficio para la colectividad. La polarización en Tabasco ha representado por años el estancamiento social que podría, mediante el diálogo constructivo, resolverse y llegar a un acuerdo propositivo.
Dirimir las diferencias políticas respetando sin imponer, con creatividad, empatía y no violencia para la transformación pacífica de los conflictos, es crucial para avanzar en temas torales. Tabasco se merece un gobierno humanista que privilegie la recomposición del tejido social.
El sociólogo y matemático noruego Johan Galtung sostiene que los conflictos pueden transformarse por medios pacíficos, y plantea una hipótesis de trabajo basada en la concepción bidimensional de los conflictos (positiva-negativa, crisis-oportunidad). Es decir, que si se usan medios positivos y oportunos para la transformación de una diferencia, entonces el fin será igualmente (o al menos potencialmente) positivo y constructivo.
Estamos en la antesala de un proceso electoral a nivel local en un estado que requiere a un líder con experiencia, con proyecto, humanista, desligado de grupos fácticos y decidido a enfrentar las causas que generan la violencia; que impulse el campo, la pesca, la agricultura, la industria, el comercio, entre otras áreas económicas que ya han demostrado en otros tiempos que pueden ser altamente productivas en la entidad.
En el primer debate de los aspirantes a gobernador(a) del estado acuparon mayor espacio las acusaciones mutuas. Tal como lo rezan los manuales de marketing, a ver quién pone el golpe más demoledor que le represente perder votos a uno y ganarlos a otro. Así, los hechos violentos que han enlutado familias en el estado se convirtieron en el “mejor” tema para sacar raja política.
Javier May Rodríguez, candidato de la coalición Morena, Partido del Trabajo y Verde Ecologista, se convirtió en el abanderado al que los otros tres aspirantes le lanzaron dardos acusadores, entendible en virtud de que es puntero en las encuestas que se han realizado en la entidad, tanto por credenciales propias como por el reflejo de la fuerza nacional que tiene el presidente Andrés Manuel López Obrador, líder natural de Morena, y por la aceptación que tiene en Tabasco la candidatura de Claudia Sheinbaum Pardo a la presidencia de la República.
Por lo anterior, excuso decir, la lucha en esta contienda electoral -dicho en sentido llano- no es por la gubernatura, es por la supervivencia de los partidos políticos que en coalición buscan mantener su registro en una entidad canteada a favor del movimiento político que inició López Obrador, acompañado entre otros líderes por May Rodríguez
Aunque el candidato de la coalición Sigamos Haciendo Historia en Tabasco expuso propuestas relacionadas a la seguridad, medio ambiente, política y gobierno, hubo que destinar una buena parte de su tiempo para fijar su posición ante los señalamientos de presunto desvío de recursos, violencia, entre otros.
Lorena Beaurregard de los Santos, abanderada del PRI y PAN, tiene la difícil tarea de evitar que el PRI pierda su registro, y en función de ello lanzó dardos, aunque en ellos deba decir que muchos priistas (amigos suyos) se encuentran en las filas de Morena, no sabemos si con el ánimo de decir que los corruptos ya están del otro lado y en ese caso señalarlos como tales, o en el peor de los casos, reconocer que el tricolor se va quedando más solo.
El abanderado del PRD, Juan Manuel Fócil, también está en la lucha por recuperar simpatizantes y con ello votos, luego de que un importante número de líderes y militante se fueron a las filas de Morena. Durante su exposición, las acusaciones de corruptos, mentirosos y de proteger delincuentes no se hicieron esperar, en un estado donde en últimas fechas la violencia se ha hecho más presente entre grupos del crimen organizado.
La candidata de Movimiento Ciudadano, Minés de la Fuente Dagdug, tuvo la intervención más deslucida de la noche del primer debate, nerviosa, inexperta y sin propuestas importantes. Su paso en este escenario puso en evidencia la improvisación del partido naranja.
En el próximo debate a realizarse el 13 de mayo, May Rodríguez habrá de sortear una nueva andanada de ataques provenientes de los otros candidatos; habrá de contener y cuidar su ventaja, mientras ellos buscarán el espacio para conectar con la ciudadanía, que los conozcan y conseguir los votos que están en las comunidades y no en las redes sociales para salvar su registro. La decisión estará en el electorado, y los tiempos no están para equivocar el destino.
Paseo Usumacinta s/n Esq Ayuntamiento. Col Gil y Sáenz, Villahermosa, Tabasco