Aprovecha titular de TSJ su informe para "felicitar" a AMLO y Adán Augusto

Durante su informe semestral de labores, el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) Jorge Javier Priego Solís, no perdió la oportunidad de felicitar a Andrés Manuel López Obrador y Adán Augusto López Hernández por el triunfo del 1 de julio que los convirtió en virtual presidente de la república y gobernador electo de Tabasco.

El titular del poder judicial en la entidad dijo que para llegar a esta "epoca de gloriosas libertades" el pueblo mexicano pasó por la dominación de un partido único, por una época de lo que algunos llamaron “la dictadura perfecta” , una dictadura disfrazada de democracia, marcada por el clientelismo político, de cuotas partidistas, de represión de la libertad de expresión, de cacicazgos regionales y de politización de lo judicial.

Fue un tiempo "de recomendaciones internacionales en materia de derechos humanos, donde las decisiones judiciales se tomaban en el Poder Ejecutivo, con una desfachatez que hubiera avergonzado a Montesquieu y a los defensores de la democracia, la libertad y la separación de poderes"

Sin embargo, esto ha sido transformado pues apenas empezaron los verdaderos cambios," esta época, en este estado y orgullosamente con tabasqueños al frente", dijo, para luego enviar sus felicitaciones a  López Obrador, primer tabasqueño en la historia en llegar a la presidencia de la república.

"De igual forma, felicito al próximo gobernador del estado de Tabasco, licenciado Adán Augusto López Hernández, a quien otorgo mis mejores deseos para que con su persona al frente de este maravilloso estado, siga creciendo y avanzando por el bien de los tabasqueños".

Es bueno recordar la historia -continuó-, para que valoremos la auténtica vida democrática que hoy vivimos, sin simulaciones, sin artimañas ni chicanas porque como dijo alguna vez nuestro señor gobernador: “las chicanas se notan”

Finalmente, aseveró que gracias al actual gobernador, Arturo Núñez Jiménez se ha logrado tener paz social; respeto e independencia entre los poderes del estado;auténtica vida republicana, en la cual la ley es el faro y el ancla del Estado, no los caprichos ni las pasiones del gobernante en turno; y proyectos serios, políticas de Estado, programas institucionales, y sobre todo planeación.